15/05/2025
El pádel es, sin duda, uno de los fenómenos deportivos más impactantes de las últimas décadas. Su crecimiento exponencial lo ha catapultado a pistas de todo el mundo, convirtiéndose en una pasión para millones. Sin embargo, a pesar de su omnipresencia actual, su origen es una historia fascinante, un relato de ingenio, casualidad y amistad que no todos conocen. Aunque parezca un deporte con una larga tradición, la realidad es que su vida es corta, y su nacimiento, casi un accidente afortunado en el soleado Acapulco de finales de los años 60.
Un Problema de Espacio, una Solución Genial: Acapulco 1969
La historia del pádel comienza en 1969 y tiene un nombre propio: Enrique Corcuera. Este empresario mexicano, amante de los deportes de raqueta, deseaba construir una pista de frontenis en su finca de Las Brisas, en Acapulco. Sin embargo, se encontró con un problema fundamental: el espacio disponible no era suficiente para una pista reglamentaria y, además, la densa vegetación que rodeaba el terreno amenazaba con 'comerse' las pelotas a cada instante.
Ante esta disyuntiva, Corcuera no se rindió. En un acto de creatividad que cambiaría la historia del deporte, decidió adaptar el espacio que tenía. Levantó paredes en el fondo y en los laterales de una pista de menores dimensiones, de aproximadamente 20x10 metros. El objetivo inicial era simple: evitar que la pelota se escapara hacia la vegetación. Lo que no imaginó es que esas paredes no solo serían un límite, sino que se convertirían en un elemento activo y definitorio del juego. Acababa de nacer, sin saberlo, el "Paddle Corcuera".
Las Primeras Reglas: Un Juego entre Amigos
Con la pista construida, Corcuera y sus amigos comenzaron a jugar con palas de madera y pelotas de tenis. Las reglas se fueron definiendo sobre la marcha, de manera orgánica y social. La principal y más revolucionaria norma fue permitir que la pelota rebotara en las paredes después de haber botado en el suelo. Este simple cambio transformó por completo la dinámica del juego, haciéndolo más continuo, divertido y requiriendo una nueva estrategia que el tenis no contemplaba.
Las primeras reglas eran sencillas:
- El saque se realizaba por debajo de la cintura.
- La puntuación era idéntica a la del tenis.
- La pelota podía golpear las paredes después de un bote en el campo contrario, dando una segunda oportunidad para devolverla.
Este nuevo juego era increíblemente adictivo. Era más fácil de aprender que el tenis, menos exigente físicamente al principio, y tremendamente social. La pista se convirtió en el epicentro de las reuniones de Corcuera con sus amigos y familiares, todos fascinados por la dinámica del rebote.
El Salto a Europa: Alfonso de Hohenlohe y el Marbella Club
La historia del pádel no se puede entender sin su segundo protagonista: el príncipe Alfonso de Hohenlohe, un aristócrata español amigo de Corcuera. En 1974, durante una visita a la casa del empresario en Acapulco, Hohenlohe quedó absolutamente cautivado por ese nuevo y divertido deporte. Vio en él un potencial enorme por su carácter social y su facilidad de aprendizaje.
Convencido de su éxito, decidió importar la idea a España. A su regreso, tras perfeccionar algunos detalles del reglamento y del diseño de la pista, construyó las dos primeras pistas de pádel de España en su exclusivo Marbella Club Hotel. Este fue el punto de partida de la increíble expansión del pádel en el país. Al principio, era un deporte elitista, jugado por los clientes del hotel y las personalidades que frecuentaban la Costa del Sol, pero poco a poco, su popularidad comenzó a extenderse como la pólvora.
Argentina: La Otra Gran Potencia del Pádel
Casi en paralelo a su llegada a España, el pádel también cruzó el charco hacia el sur. Julio Menditeguy, un miembro de la élite argentina que también frecuentaba Marbella, fue otro de los que se enamoró del deporte. Llevó la idea a Argentina, donde el pádel encontró un terreno fértil para crecer hasta convertirse en un fenómeno de masas.
Durante los años 80 y 90, Argentina se convirtió en la gran potencia mundial del pádel. Se construyeron miles de pistas por todo el país y surgieron los primeros jugadores profesionales que dominaron el circuito mundial durante años. La pasión argentina por el pádel fue fundamental para su profesionalización y para establecer las bases competitivas del deporte que conocemos hoy.
Tabla Comparativa: Del Origen a la Actualidad
La evolución del pádel ha sido notable. Aquí podemos ver las diferencias clave entre el juego original de Corcuera y el deporte reglamentado actual.
| Característica | Pádel de Corcuera (1969) | Pádel Moderno (Reglamentario) |
|---|---|---|
| Dimensiones Pista | Aproximadas (20x10m), adaptadas al espacio | Reglamentarias (20x10m exactos) |
| Paredes | Muros de hormigón. Sin valla metálica. | Combinación de cristal o muro con malla metálica. |
| Palas | De madera, más pequeñas y pesadas. | Materiales compuestos (fibra de carbono, foam, etc.). |
| Reglamento | Informal, pactado entre amigos. | Estandarizado por la Federación Internacional de Pádel (FIP). |
| Objetivo | Principalmente lúdico y social. | Lúdico, amateur y profesional de alta competición. |
Preguntas Frecuentes sobre el Origen del Pádel
La curiosa historia del nacimiento del pádel suele generar muchas preguntas. Aquí resolvemos algunas de las más comunes.
¿Quién inventó realmente el pádel?
El inventor del pádel es el empresario mexicano Enrique Corcuera. Fue él quien, en 1969, diseñó y construyó la primera pista en su casa de Acapulco, sentando las bases del juego tal y como lo conocemos.
¿Es el pádel una variante del tenis?
Se inspira en el tenis en cuanto al sistema de puntuación y el uso de una red central. Sin embargo, la inclusión de las paredes como un elemento activo del juego lo convierte en un deporte completamente diferente, con su propia estrategia, técnica y dinámica.
¿Dónde se construyó la primera pista de pádel del mundo?
La primera pista de pádel del mundo se construyó en Acapulco (México), en la residencia privada de Enrique Corcuera, en el año 1969.
¿Por qué el pádel es tan popular en España y Argentina?
La popularidad en estos dos países se debe a que fueron los primeros en "adoptar" el deporte fuera de México. Figuras clave como Alfonso de Hohenlohe en España y Julio Menditeguy en Argentina fueron los embajadores que introdujeron el pádel en sus respectivos países, donde rápidamente caló hondo en la cultura deportiva y social.
Así, lo que comenzó como una solución ingeniosa a un problema de espacio en un jardín de Acapulco, se transformó en un viaje increíble a través de continentes, amistades y décadas. El pádel es la prueba de que, a veces, las mejores ideas surgen de la necesidad y la casualidad, convirtiéndose en una pasión global que hoy une a millones de personas en torno a una pista de 20x10.
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